El Departamento de Justicia de Estados Unidos anunció la presentación de cargos federales contra tres personas vinculadas a una presunta conspiración organizada por autoridades iraníes para asesinar al presidente electo Donald Trump. La trama, de acuerdo con las acusaciones, fue descubierta como parte de una operación de vigilancia a individuos relacionados con el régimen iraní, quienes supuestamente estaban bajo contrato para llevar a cabo el atentado en suelo estadounidense.
Detalles de la Investigación y Amenazas de Irán
«Existen pocos actores en el mundo que representen una amenaza tan seria para la seguridad de los Estados Unidos como Irán», afirmó Merrick Garland, el fiscal general de EE.UU., en una conferencia de prensa. La investigación reveló que Carlisle Rivera y Jonathon Loadholt, ambos residentes de Nueva York, fueron presuntamente reclutados por un «agente iraní» con el fin de ejecutar un ataque no solo contra Trump, sino también contra otro ciudadano estadounidense de origen iraníales Acusados y sus Supuestos Colaboradores
El principal sospechoso, Farhad Shakeri, recibió supuestamente instrucciones del gobierno iraní para liderar una red de asociados en EE.UU. destinada a ejecutar estos objetivos. Mientras Shakeri permanece prófugo en Irán, Rivera y Loadholt fueron arrestados por las autoridades en Nueva York. Según el Departamento de Justicia, esta operación es parte de un esfuerzo de Irán por intimidar y eliminar a críticos del régimen .
PUEDES LEER: Trump Gana en Springfield, Ohio, entre Polémicas y Desinformación sobre Inmigrantes Haitianos
Cargos Feciales
Los tres acusados enfrentan cargos graves, incluidos intento de asesinato por encargo, conspiración para cometer asesinato y blanqueo de capitales. De acuerdo con las leyes estadounidenses, estos delitos podrían llevar a una pena de hasta 40 años de prisión para los implicados. Además, Shakeri enfrenta cargos por terrorismo y violaciones a las sanciones de EE.UU., lo que podría añadir hasta 60 años adicionales de cárcel .
Reacción de las Autoridades
ha despertado preocupación entre las autoridades estadounidenses sobre la capacidad de redes extranjeras para operar en el país. «Esta operación evidencia hasta qué punto algunos regímenes están dispuestos a llegar para intimidar a líderes y ciudadanos estadounidenses», afirmó Garland, subrayando el compromiso del Departamento de Justicia para proteger la seguridad nacional.
Fuentes:
- Departamento de Justicias Unidos
- Entrevistas y comunicados de Merrick Garland
- Informes de seguimiento sobre amenazas extranjeras
